La mejor manera de irradiar belleza es partiendo del conocimiento de quién eres: tu personalidad, gustos, estilo personal, tus puntos fuertes y débiles, teniendo claro que debe haber una coherencia entre tu imagen de todos los días y la imagen que quieres proyectar ese día.
Se debe evitar el maquillaje como una mujer adulta o vestirte demasiado sexy o provocativa.
Si no estás acostumbrada a usar tacos muy altos no los uses, o bien cómpralos con anticipación y practica el caminar en casa, de modo que ese día proyectes seguridad en el andar.
Los labios son la zona más importante del rostro, para ello podemos maquillarlo de un color fuerte como un fucsia o un rosado, y posteriormente te puedes hacer un peinado con unas ondulaciones o algunos reflejos de colores más claros, como tonalidades cobrizas o rubias.
Una sugerencia de maquillaje es utilizar una base de color neutral, tan solo para tapar las imperfecciones de la piel, posteriormente maquillar los ojos con un delineador y puedes realizar un efecto esfumado, en tus ojos.
Si vas a usar blanco u otro color busca que te aporte luz al rostro, cuando estés tranquila párate frente al espejo y acerca las prendas que tienes en casa a tu rostro y fíjate cuál realza tus facciones.
Busca un modelo que resalte aquellas partes del cuerpo que más te gustan y que neutralice aquellas que te disgusta, no elijas el vestido porque está de moda o le queda bien a la chica del figurín, todas tenemos cuerpos diferentes y los distintos modelos favorecen más a un tipo de cuerpo.
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